Especialistas de la Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Azcapotzalco (UAM-A), desarrollaron una alternativa tecnológica para procesar alrededor de tres toneladas de residuos sólidos urbanos destinados a la manufactura de objetos biodegradables mediante un método que combina los desperdicios del nopal y la harina de trigo.
El ingeniero Enrique Alarcón Jiménez, investigador del Departamento de Sistemas de la UAM-A, indicó que el proyecto es una alternativa para dar tratamiento a los residuos sólidos causados por los procesos productivos de las empresas, industrias y diversas escuelas del Distrito Federal, en una primera etapa.
Explicó que este desarrollo pretende convertir la generación de residuos en productos ecológicos a fin de formar parte de los llamados “procesos verdes”, pues se propone disminuir el daño ambiental mediante el empleo de energía renovable, agua de lluvia e insumos a bajo costo que conducen a la sustentabilidad.
El proyecto, señaló Alarcón Jiménez, forma parte del programa “Ciudad con Conectividad y Tecnología”, dentro del subprograma de Tecnologías Urbanas, del Instituto de Ciencia y Tecnología del Distrito Federal (ICyTDF), y consiste en utilizar alrededor de tres toneladas diarias de desechos sólidos: arena quemada de fundición, residuos de poda, de mercados de flores, tallos y vegetales, plásticos espumados, así como polvo de metales.
A decir del experto, los desechos no requieren una selección previa, ya que pasan por un equipo denominado generador de partículas para ser transformados en pequeños trozos de material que son aglomerados o unidos mediante un “biopolímero” derivado del mucílago del nopal y la harina de trigo.
Con esta tecnología “ecológica” pueden manufacturarse todo tipo de mobiliario urbano y residencial, contenedores y recipientes para residuos sólidos, sistemas de aislantes térmicos y acústicos, así como de calderas, tuberías, señalamientos viales y de protección civil, entre otros.
Vía: EL IMPARCIAL.COM