Pocos para limpiar San Juan

La experiencia de otros años ha demostrado que muy pocos son los que se animan a subir a San Juan para trabajar ‘Por un monte más limpio’. Apenas una docena de personas se acercó hasta la sede de la Cofradía en La Laguna para recoger bolsas de basura y pinchos que evitaran tener que agacharse.

Entre setos y matorrales, abundaban vasos y botellas de plástico, bolsas de chuches, cajetillas de tabaco, pero también cristal y vidrio. Especialmente sucia estaba el entorno de los asadores, del Ermitaño y también de la fuente próxima a La Laguna. Sólo en este último punto se llenaron tres bolsas.

Limpieza del monte y comidaVía: elcorreo.com

 


La basura sigue acumulándose en las calles de Nápoles

La basura sigue acumulándose en las calles de Nápoles (sur de Italia) donde, según los datos de la Empresa municipal de Servicios de Higiene Ambiental (ASIA), hay unas 2.000 toneladas de residuos sin retirar que han vuelto a generar protestas entre los vecinos.

La llamada “crisis de las basuras” de Nápoles vuelve hoy a cobrar protagonismo en Italia después de que la pasada noche los bomberos de la provincia tuvieran que atender unos 20 pequeños incendios entre los montones de residuos acumulados en las calles.

Además en dos barrios de la ciudad varios vecinos salieron a la calle también anoche para protestar contra el olor y las condiciones insalubres que esto genera, volcando contenedores y esparciendo los residuos por medio de la calzada.

Este nuevo repunte en la acumulación de basuras en las calles de Nápoles llega después de que a principios del pasado mayo el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, volviera a enviar militares para ayudar con la recogida de los residuos.

Muchas voces críticas vieron en esta decisión del jefe del Gobierno un interés electoralista de cara a los comicios municipales de mayo, que finalmente terminó perdiendo el candidato propuesto por Berlusconi a favor del propuesto por el opositor partido Italia de los Valores (IDV), Luigi de Magistris.

El año pasado, los vecinos de las localidades del entorno del Parque Nacional del Vesubio, situado frente a la costa de Nápoles, salieron a las calles para protestar contra el olor que provenía de un vertedero y contra la apertura de uno nuevo en la zona, e impidieron el trabajo normal a los empleados de la recogida.

Esto motivó que en las calles de la provincia sureña se acumularan más de 2.000 toneladas de residuos y se repitieran así las imágenes que dejó la anterior crisis en 2008, y el Gobierno de Berlusconi finalmente accedió a suspender el proyecto del nuevo vertedero, que estaba previsto que fuera el mayor de Europa.

Vía: EFEVerde


Cataluña inicia una campaña de inspecciones entre empresas de reciclaje de escombros y tierras

Los Mossos d’Esquadra y la Agencia Catalana de Residuos, dependiente de la Generalitat, han iniciado una campaña de inspecciones en empresas de reciclaje de escombros y tierras, sobre todo de la construcción, con el objetivo de normalizar el sector, garantizando el respeto al medio ambiente, la normativa vigente y la libre competencia.

La iniciativa ya ha empezado en Girona y quiere perseguir la actividad ilegal en el sector del reciclaje, y mejorar la eficacia contra el intrusismo profesional y prevenir los delitos e infracciones administrativas, evitando el perjuicio que estos hechos representan para el sector.

La campaña quiere verificar que estas instalaciones están inscritas en el Registro General de Gestores de Residuos de Cataluña y cumplen con la normativa vigente.

La primera de las inspecciones, realizada por agentes de la Unidad Regional de Medio Ambiente de Girona y los inspectores de la Agencia Catalana de Residuos, tuvo lugar el miércoles pasado en una empresa de Santa Cristina d’Aro.

En ese caso, se comprobó que la empresa estaba realizando la actividad sin tener ningún tipo de permiso ambiental ni estar inscrita en el Registro General de Gestores de Residuos de Cataluña.

También se constató que incumplía la norma relativa al medio ambiente, ya que no disponía de sistemas de extinción de incendios, y en salud laboral, por falta de instalaciones necesarias para los trabajadores.

Vía: LA VANGUARDIA


“En los Garbigune somos testigos de la evolución de la sociedad en materia de consumo”

El Garbigune de Urretxu ha cumplido quince años, los mismos que lleva su responsable Marcos Iglesias trabajando en él. Desde su atalaya del puerto de Deskarga es testigo de la evolución de la sociedad en materia de consumo

¿Cómo funcionan los Garbigune?

Los primero fueron los de Debagoiena. Cuando la Mancomunidad Sasieta decidió abrir el de Urretxu fuimos a allí a conocer cómo funcionaban. Es muy simple: tenemos once contenedores y a cada uno de ellos se arroja un tipo de residuo. Aquello que se puede recuperar se envía a un centro y el resto al vertedero. También recogemos residuos tóxicos y peligrosos: pintura, barniz, disolvente, fluorescentes, aceite de automoción…

¿Qué más residuos recogen?

En un contenedor recogemos chatarra, en otro papel y cartón, en el tercero voluminosos (sofás, colchones, moquetas…) y plásticos que no se recuperan (persianas de PVC, poliespán…) y en el cuarto plástico de embalajes (polietileno de baja densidad). Además tenemos otros dos contenedores para la madera, dos más para los escombros y otro para el polietileno de alta densidad. Los dos últimos son para los electrodomésticos: uno para la línea blanca (lavadoras, frigoríficos, hornos…) y otro para la línea marrón (televisores, ordenadores, impresoras…).

¿Cuántos Garbigunes hay en Gipuzkoa?

Cada vez más, pero no sé cuántos son en total. El primero que abrió Sasieta fue el de Urretxu, después abrimos otro en Beasain porque a la gente de aquella zona le costaba venir aquí y ahora vamos a abrir otro en Ordizia.

¿Han cambiado mucho nuestros hábitos en estos quince años?

Somos testigos de la evolución de la sociedad. Los electrodomésticos se sustituyen cada vez antes. Viene más gente y cada vez recogemos más material. Antes la línea marrón se enviaba al vertedero, pero después comenzamos a recuperarla.

¿Considera que la sociedad está más concienciada?

Sí. Cada vez viene más gente y recibimos visitas de escolares. Cada día vienen unas 30 personas de Ezkio-Itsaso, Legazpi, Urretxu y Zumarraga. De vez en cuando también viene alguien de Antzuola, pues este Garbigune lo tienen más a mano que el de Bergara.

¿A dónde se envía todo aquello que se puede recuperar?

El papel y el cartón, a la papelera de Legorreta. La madera se manda a otra planta de Legorreta, donde se utiliza para hacer aglomerado. Los aparatos eléctricos y electrónicos van a Bizkaia, a la empresa Metal Recicling. Las baterías las recoge otra empresa, los neumáticos Desguaces Lezo… Los que están bien se aprovechan y los que están mal se desmenuzan y se utilizan para hacer asfalto. Antaño se quemaban en Cementos Lemoa.

¿Qué consejo le daría a la gente?

Nosotros ponemos los medios: contenedores, un día a la semana pasamos a recoger los trastos… Es una pena que siga habiendo gente que echa sus trastos en el monte, como pasó hace poco en Irimo. ¡Es más fácil dejarlos en un contenedor!

¿Qué es lo más curioso que le han traído jamás?

Me han traído muchas cosas curiosas. Por ejemplo, un traje de legionario. En otra ocasión un señor me trajo tres piernas ortopédicas. No supe qué hacer con ellas. También suelen traer antigüedades: radios viejas, planchas, libros antiguos…

garbigune de urretxuVía: noticiasdegipuzkoa.com


Un vertido de 10.000 litros de aceite y 3 vehículos calcinados en un incendio

Un tractor con su cuba y dos furgonetas completamente calcinadas y un vertido de unos 10.000 litros de aceite reciclado. Ese es el balance del incendio que ayer a la tarde asolo la nave industrial que la empresa de reciclaje de aceites Eco Recycling posee en el polígono de Marratxí.

Al parecer, el fuego se inició en el patio de la empresa, donde estaban aparcados tanto el tractor como las furgonetas. Junto a estos vehículos se encontraban unos contenedores metálicos y de plástico donde se guardaba el aceite reciclado que también se han quemado.

Por causas todavía desconocidas, el fuego ha comenzado en el tractor y rápidamente se ha propagado a los contenedores de aceite, lo que ha provocado un vertido de unos 10.000 litros de esta sustancia. Como consecuencia del siniestro, los tres vehículos han quedado completamente calcinados. El resto de la nave no ha sufrido daños y afortunadamente no ha habido que lamentar heridos.

Vía: EL MUNDO


El tráfico de chatarra electrónica sucia hacia países pobres

El 28 de marzo del 2009, fue interceptado un contenedor con 10.380 kilos de residuos, unos 2.000 compresores de frigoríficos viejos, aún con aceite contaminante y gas con alto poder de calentamiento de la planta de Cespa, la filial de medio ambiente de Ferrovial, en Galicia, en un carguero que había partido 4 días antes desde el Puerto de Vigo y con destino final de Port Kasim, el segundo puerto de Pakistán, para ser desguazado y recuperar el metal, operación más rentable que extraer previamente el gas y el aceite y tratarlos por separado, algo obligatorio en Europa.

Por ley, desde 2005, cualquier aparato que tenga una pila o un enchufe debe ser tratado: eliminando los materiales peligrosos (gases, aceites, metales pesados…) para reutilizar el metal (hierro, acero, cobre…).

Ferrovial se desmarca del caso y no se explica cómo acabaron allí esos compresores sin descontaminar. La empresa afirma que no sabe cómo apareció el aceite en los compresores y que no es responsabilidad suya.

Noaman Alam, director de la firma paquistaní Schion International, la empresa que compró la carga, muestra como prueba un correo electrónico de un responsable de Cespa en el que explica que están haciendo todo lo posible por recuperar el contenedor y que ha sido el Gobierno el que les ha impedido exportarlo por estar contaminado.

El contenedor fue retenido durante una operación de la Organización Mundial de Aduanas en 65 países, pero a pesar de esto, el tráfico de chatarra electrónica sucia hacia países pobres, como Pakistán o China, sigue creciendo para eludir el reciclaje.

En 2009 se pusieron en el mercado español 702.000 toneladas de productos electrónicos y eléctricos, pero solo se trataron 124.987 (el 17%). No todo lo que se vende en un año se debe reciclar ese ejercicio. Sin embargo, la gran diferencia entre lo reciclado y lo que se vende da idea de que algo pasa. Muchas neveras y televisores acaban en chatarreros ilegales, hay robos en los puntos limpios de los Ayuntamientos… Sí, pero aun así algo tiene que estar saliendo al extranjero.

Cuatro responsables de plantas de tratamiento de residuos cuentan que reciben periódicamente llamadas de empresas de Marruecos, China, India, Ghana, Gambia… para comprar la basura. Ramón Altadill, responsable de Electrorecycling, una planta en Barcelona, explica que en el extranjero hay intermediarios que se interesan por comprarle los residuos y recuerda un caso ilustrativo: “Nos llamaron porque los salesianos habían recibido como donación para Bolivia un contenedor con material informático. Cuando lo vimos eran cajas registradoras viejas, lectores de código de barras… casi todo inservible. Tenía valor como chatarra, pero en Bolivia no iba a servir más que para contaminar. Lo desguazamos aquí”. Otras donaciones sí llegaron a su destino.

Vertedero_aparatos_electronicos_GhanaVía: EL PAIS


Computadores viejos, útiles para crear verdaderos robots

De los 22.000 equipos que al año recibe en calidad de donación el programa Computadores para Educar -Ministerio de las TIC-, un poco menos del 20 por ciento no logran ser reacondicionados para su uso.

Y este porcentaje restante,que se traduce en residuo tecnológico, es manufacturado en una bodega de Bogotá con un solo propósito: convertirlo en insumo para hacer robots en colegios públicos.

Partes eléctricas, mecánicas, electromecánicas y electrónicas de computadores viejos se recuperan, ensamblan y empacan en kits para incorporarlos en proyectos de robótica y automatización. Esto se hace en el Centro Nacional de Aprovechamiento de Residuos Electrónicos (Cenare), ubicado en la zona industrial.

El objetivo es que contribuyan a explicar conceptos de física y matemáticas, y solucionen problemas del entorno. En el Cenare, con tarjetas electrónicas, mouse, alambres de cobre, botones de impresora, motores, unidades de CD y CPU diseñaron una estación meteorológica, un separador de basuras automatizado, una puerta eléctrica y un ratón robot.

Este año, la meta es procesar 650 toneladas de residuos tecnológicos y entregarlas a 50 colegios del país como insumos robóticos.

Vía: EL TIEMPO.COM


El Cener investiga para obtener bioetanol de restos de melocotones y kiwis

Hasta en cuatro proyectos trabaja o ha trabajado el Centro Nacional de Energías Renovables (Cener) con el objetivo de obtener bioetanol a partir de residuos no aprovechables de la industria conservera y de la agricultura.

Restos de zanahorias, pimientos, kiwis y melocotones, entre otras hortalizas y frutas, han pasado por varias pruebas de laboratorio y está cerca el paso a una escala mayor.

El proyecto actualmente en vigor es el del Programa de Cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo (Interreg IV B Sudoe), denominado Value. Este tipo de programas apoya el desarrollo regional a través de la cofinanciación de proyectos transnacionales por medio del Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional). Value está liderado por la Asociación para la Investigación, el Desarrollo y la Innovación Alimentaria (AIDIA), que gestiona el Centro de Innovación y Tecnología Alimentaria de La Rioja (CITA). De forma genérica, consiste en el intercambio y transferencia tecnológica sobre valorización de residuos de la industria de transformados vegetales del Sudoe. Participan centros de investigación del País Vasco, Navarra, La Rioja y Madrid, y cuenta también con socios de Portugal y Francia.

Hasta en cuatro proyectos trabaja o ha trabajado el Centro Nacional de Energías Renovables (Cener) con el objetivo de obtener bioetanol a partir de residuos no aprovechables de la industria conservera y de la agricultura.

Vía: ENERGÍAS RENOVABLES