Hasta en cuatro proyectos trabaja o ha trabajado el Centro Nacional de Energías Renovables (Cener) con el objetivo de obtener bioetanol a partir de residuos no aprovechables de la industria conservera y de la agricultura.
Restos de zanahorias, pimientos, kiwis y melocotones, entre otras hortalizas y frutas, han pasado por varias pruebas de laboratorio y está cerca el paso a una escala mayor.
El proyecto actualmente en vigor es el del Programa de Cooperación Territorial del Espacio Sudoeste Europeo (Interreg IV B Sudoe), denominado Value. Este tipo de programas apoya el desarrollo regional a través de la cofinanciación de proyectos transnacionales por medio del Feder (Fondo Europeo de Desarrollo Regional). Value está liderado por la Asociación para la Investigación, el Desarrollo y la Innovación Alimentaria (AIDIA), que gestiona el Centro de Innovación y Tecnología Alimentaria de La Rioja (CITA). De forma genérica, consiste en el intercambio y transferencia tecnológica sobre valorización de residuos de la industria de transformados vegetales del Sudoe. Participan centros de investigación del País Vasco, Navarra, La Rioja y Madrid, y cuenta también con socios de Portugal y Francia.
Vía: ENERGÍAS RENOVABLES