La sociedad Los Tranvías de Zaragoza, encargada de la obra, está pendiente de recibir la licencia de actividad municipal, para instalar una planta temporal de gestión de residuos, con la que reciclar de manera sostenible todo el material generado.
A su vez, destacaron que la ubicación de la planta se decidió con criterios económicos y medioambientales, para ahorrar los costes de un vertedero externo y evitar continuos desplazamientos de camiones a decenas de kilómetros de distancia.
El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga), ya ha dado su autorización a la planta y ha marcado los límites de partículas en suspensión que se pueden generar.
Con esto se pretende que la mayor parte posible de escombros -las vigas del Huerva, los asfaltos, el hormigón…- se puedan reciclar y reutilizar en distintos puntos de manera sostenible. Así, con los materiales más grandes se hace una primera criba, separando de las piezas los trozos de plástico, papel o cristal que pueda haber y todo se lleva a un gestor de residuos autorizado para su reciclaje. El resto se introduce en una tolva -un gran embudo- por el que entra en la trituradora, que machaca el material para poder reutilizarlo. Se trata de una planta de 47 toneladas de peso y que es móvil; tiene 3,4 metros de alto por 3 de ancho.
Vía: HERALDO.es