La industria fotovoltaica ha dado los primeros pasos para que no haya una acumulación de paneles solares que terminan su ciclo de vida, establecido en unos 25 años. Con esto pretenden demostrar que la energía solar es renovable y sostenible y, con esta intención, nació PV Cycle, que representa al 90% del mercado fotovoltaico europeo.
Es un sistema de gestión cuya meta es localizar, recoger y reciclar todos los módulos fotovoltaicos dispersos por el continente. El proceso permite aprovechar el 85% del contenido de los módulos, para fabricar otros, con una duración similar de 25 años. Tras el desmontaje y su traslado a la planta de reciclaje, se separan los componentes, que básicamente son plástico, vidrio, aluminio, cobre y silicio.
Virginia Gómez, directora científica y de operaciones de PV Cycle, explica que “el sistema es gratuito para el usuario final porque, excepto el desmontaje, cubre la recogida hasta su depósito en puntos de almacenaje y posterior traslado a la planta de reciclaje”.
En el caso de la eólica no hace falta llegar al reciclaje, ya que el aprovechamiento del aerogenerador al completo hace que el ciclo de vida del mismo se quede en una etapa anterior del proceso, en la reutilización.
Vía: ELPAÍS.com