Con la implantación del ‘Plan de Residuos Cero’, Barajas se ocupa, además de la recogida, almacenamiento y compactación de las más de 10.000 toneladas de RSU’s y de su posterior transporte y gestión, tarea que antes realizaba el Ayuntamiento de Madrid.
En la planta de Triaje se separan manualmente y de forma selectiva residuos reciclables como son el papel, el cartón, los envases y el vidrio. El resto, principalmente residuos orgánicos, no se deposita en un vertedero sino que es destinado a plantas de biometanización, para su transformación en compost y la utilización del gas metano generado en este proceso para la producción de energía eléctrica.
Por otro lado, se han construido más de 15 zonas de recogida selectiva, donde las empresas que operan en el aeropuerto pueden depositar sus residuos.
Los beneficios del ‘Plan Residuos Cero’ son el aumento del porcentaje de separación de residuos orgánicos, la conversión de la materia orgánica en energía y la minimización de emisiones, y la contratación de personas con discapacidad integrándolos en el mundo laboral.
Vía: ECOticias.com