España fue el quinto país de la UE que más residuos no minerales produjo en 2008, con 71 millones de toneladas, lo que supuso el 8 % del total de este tipo de desechos producidos en los Veintisiete, según los datos publicados hoy por Eurostat.
En 2008 se generaron unos 920 millones de toneladas de residuos no minerales en toda la Unión, es decir, unos 1.800 kilos por habitante, según este indicador que cubre la mayoría de los desechos cuya reducción se ha fijado como objetivo dentro de la estrategia medioambiental comunitaria.
Los residuos no minerales incluyen todos los de este tipo generados por los hogares y los diferentes sectores económicos, y entre ellos pueden encontrarse desechos peligrosos o no peligrosos.
La agricultura, la energía, los servicios y otros sectores produjeron un 50 % del total de residuos no minerales, mientras que la manufactura industrial generó el 26 %, y los hogares, el 23 % restante.
En el caso de España, la industria generó el 19 % de los residuos, los hogares el 33 % y el 48 % otros sectores, entre los que también se encuentran la minería, la construcción, la silvicultura, la pesca o la ganadería.
El Reino Unido fue el estado miembro que más residuos produjo, con 143 millones de toneladas, lo que supuso el 16 % del total de la UE, seguido de Alemania (129 millones, el 14 % de la UE), Francia (95 millones, el 10 %), Italia (94 millones, el 10 %) y España (71 millones, el 10 %).
Teniendo en cuenta la cantidad de residuos por habitante, las mayores proporciones se observaron en Estonia (8.220 kilos per cápita en 2008), Finlandia (4.350 kilos) y Suecia (2.540 kilos); mientras que en el otro extremo se situaron Malta (970 kilos), Chipre (1.040 kilos) y la República Checa (1.190 kilos). En España la proporción de residuos por habitante fue de 1.551 kilos, por debajo de la media europea.
Vía: ABC.es