La Consellería de Medio Ambiente ha abierto dos expedientes a la empresa de reciclaje en los últimos tres años por ampliar la actividad en seis parcelas sin autorización y por una infracción contra la Ley de Prevención y Control Integrados de la Contaminación.
La planta de biogás se enfrenta a una sanción de 30.000 euros tras haber incumplido las medidas provisionales contempladas en el primer expediente. Los técnicos de Medio Ambiente instaron al gerente de la empresa a restaurar el daño causado, cesar la actividad en las parcelas afectadas y trasladar los residuos a un gestor autorizado.
Mientras se resuelven los expedientes sancionadores, las quejas arrecian por parte de los agricultores y vecinos de la partida de Devadillo. Los hedores, las plagas de moscas y los vertidos de purines que presumiblemente proceden de la planta han llevado a algunos afectados a plantearse la posibilidad de presentar una denuncia en el juzgado de guardia.
Otra irregularidad que motivó una discusión entre un agricultor y los trabajadores de la planta fue la falta de vallado en una balsa.
Ante los expedientes de Medio Ambiente y las quejas de los vecinos y agricultores, fuentes de la empresa Tramave señalaron que la planta tiene todas las autorizaciones necesarias para tratar residuos desde 2006, así como informes favorables de la Conselleria y de los servicios técnicos municipales para la ampliación de su actividad.
La asociación de vecinos de la Pinada de Niñerola se opone a la ampliación de la planta y presentó alegaciones por el impacto paisajístico, los vertidos de residuos en un camino de la partida de Devadillo y la cercanía de varios núcleos de población consolidada, así como del parque natural del Clot de les Tortugues.
Vía: lasprovincias.es