Baleares sustituyó con combustibles alternativos el 15,3% del total de los consumidos en la planta de fabricación de cemento de Lloseta en 2009, por encima de la media nacional que ese año fue del 11,2%, según se desprende del estudio ‘Reciclado y valorización de residuos en la Industria Cementera en España’, actualizado por el Instituto Cerdá.
En el conjunto del Estado, la valorización de residuos en 2007, 2008 y 2009 supuso un 5,2%, 6,8% y 11,2% respectivamente, una cifra todavía muy alejada del 22% alcanzado de media en Europa en 2009, donde la sustitución energética está en algunos países por encima del 50%, como en los casos de Alemania, Bélgica y Holanda.
El uso de combustibles alternativos contribuye a frenar el avance del cambio climático al reducir la emisión de gases de efecto invernadero. Cabe señalar que la valorización energética de biomasa en instalaciones de producción de cemento supuso un ahorro de 375.570 toneladas de dióxido de carbono en 2009, debido a que las emisiones de CO2 de residuos de biomasa se consideran neutras.
La Fundación ha indicado que las emisiones evitadas por el uso de este combustible serían las equivalentes a las que producirían 122.000 coches en un año.
Vía: europapress.es