El Ayuntamiento de Nostián presume de que su modelo es el mejor para el tratamiento de la basura, que el reciclaje debe ser la apuesta final. Sin embargo, el Concello no sabe qué hacer con parte de los residuos que se generan en la planta, lo que le llevó a firmar en 2007 un convenio con la Xunta para intercambiar con Sogama los rechazos.
El plan de la Consellería de Medio Ambiente para la próxima década establece unas pautas para reducir en un 10% la generación de basuras, pero también asume que en Galicia habrá que quemar el 70% de los residuos urbanos, lo que supone para 2020 un 30% más que ahora. Su apuesta por la incineración se completa con otra planta como la de Sogama, en Cerceda, pero en el sur, en los límites entre Pontevedra y Ourense. La Xunta pretende decidir su localización en el segundo semestre de este año, aunque la obra no arrancará hasta 2014.
El proyecto gallego aboga por la incineración, pero también por aumentar la capacidad y la operatividad de la planta de reciclaje de Nostián.
Vía: laopinioncoruña.es