Las denuncias por vertidos en Galicia se han duplicado el pasado año con respecto a 2009, sin embargo no se ha traducido en más sanciones.
La razón de que no todas las denuncias terminen en multa son varias. Lo más habitual es que los técnicos lleguen a la zona donde se dio aviso del vertido, pero no sean capaces de averiguar cual es su origen y, por lo tanto, quién es el responsable.También puede ocurrir que aún existiendo el vertido éste no sea tóxico y, por lo tanto, no daría pie a la apertura de un expediente sancionador.
En 2010 la mitad de las sanciones impuestas por la Xunta fueron por vertidos de carácter doméstico-urbano, cifra que además va en aumento. Por el contrario, la contaminación que ocasionan las industrias se redujo en 2010. Por otra parte, la Xunta pretende que los constructores también separen sus residuos según el tipo de material de que se trate con la intención de que después puedan ser reutilizados de nuevo. Esta es una de las medidas que promoverá la Consellería de Medio Ambiente en los planes que prepara para gestionar los residuos industriales y de la construcción que tienen como objetivo minimizar el impacto medioambiental de estos deshechos y evitar posibles vertidos.
En cuanto a las industrias, la Xunta pondrá en marcha un Plan de Prevención de Residuos presupuestado en ocho millones de euros. En este campo se prevén medidas como asesorar a las empresas sobre la tecnología disponible para reducir sus desperdicios, campañas de sensibilización, así como realizar análisis sobre el ciclo de vida de algunos de los productos de las compañías.
Vía: laopinioncoruña.es